Entre la Salvación y el Señorio de Cristo

Que tal mis queridos amigos, nos volvemos a encontrar, luego de un día completo de preparar el pavo,  con la familia y mi esposa a la cabeza, el pure, el relleno, el chocolate con la receta de mi abuelita, (receta secreta, se lo aseguro, no sabe a chocolate de calcetín, sino a puro y real chocolate, si quiere se la vendo, no a mi abuelita sino la receta, la necesidad tiene cara de chocolate) bueno pasamos horas, el pavo como debe saber, dura horas para hornearse, si no lo sabe, ya para navidad estrénese para prepararlo, bueno a punta de las 6:00 pm, ya estabamos todos sentados, con las gracias de rigor, pero sabe, mi amigo aquí quiero decirle algo, las gracias son en todo, en lo bueno, en lo malo, porque todo actúa para bien, pero solo a los que son sus Hijos (allí viene el problema, no es para todo el mundo, como muchos creen) entonces nos sentamos, comimos y se acabo, menos de una hora, y es que estabamos con un hambre feroz, todos felices y contentos, con su lista en mano para papá Noel, si mi amigo, era nuestro jueves azul, me llamaré Noel, para irme de domingo de ramos a terminar de comprar sus regalos y es que han pedido como los buenos, desde el WiiU, con sus juegos, claro esta, pasando por juegos para PS3, más juegos para Wii, ni decir la lista de juegos y accesorios para el iPad y el touch, mi mujer ropa y su teclado para su tablet, otro quiere su Maquina de impresión, el problema es que la máquinita de marras viene con sus materiales y bueno si antes costaba un ojo de la cara (bueno de ¿dónde más?) ahora me tendre que comprar un lazarillo porque mi perrito que tambien tiene su lista, debe cambair de cama y cobija, pues aún no aprende a llevarme, solo sabe acercarme al refrigerador en donde está su comida y cuando tiene hambre.

Pero bueno mis amigos, nos estamos alejando del tema (¿cuál era?), en fin veremos que todo salga bien, pero sabe, muchos no celebran navidad, otros como nosotros, comemos nuestro pollo (olvidese de pavo, nuevamente !NO! gritan todos inclusive Kiba, en engreído) vemos una película navideña, Winnie Poh, nos sentamos en la sala, calientitos con un chocolate y abrimos los regalos, muchos ya saben lo que son, pero siempre la ilusicón de abrirlos da muestras de felicidad, por otro lado hay gente que su celebración nada tiene que ver con el nacimiento de Jesús, a pesar de tener listos los reglaos, porque entre celebración y brindis, pierden la noción para lo cual se reunieron, pero sabe mi amigo, hermanito, en un par de días vamos a hablar más seriamente al respecto, hoy solo quiero adelantarle lo que nosotros venimos haciendo, el arbolito de Charlie Brown está medio anémico, pero quién no lo está.

Mi amigo, he venido escuchando desde hace mucho tiempo una frase y empece a buscar de dónde provenía y me dí con la sorpresa en una de mis lecturas que fue un tal Chafer en 1918, quien la instituyó, escribiendo «El cristianismo carnal… se caracteriza por un andar que está en el mismo plano que el del ho9mbre natural (o sea no salvo)». En esos años era algo extraño, pero dele una miradita a su alrededor, hoy que hay servicio, ¿qué diferencia hay entre los que está afuera, con los que hay adentro? (ojo no con todos), ambos tienen una misma vida, lo único es que unos llegan al templo y ya no hablan palabrotas, (pero las piensan). Lo malo de esto es que esas dos tendencias, el verdadero cristiano que hasta esas fechas profesaba seguir a Jesús y aquel que estaba en la iglesia pero su vida nada diferenciaba de los de afuera, y tanto se comenzó a meter en nuestras congregaciones, que se empezó a cruzar una línea que separaba la salvación del discípulado, la iglesia y el reino, la predicación de Cristo, la fe y el arrepentimiento y entre la era de la ley y la era de la gracia, se dividió a tales extremos que una hacía cancelar la otra y entramos a la era de la gracia, todo lo obtenemos por gracia, ¿no se ha dado cuenta?, por lo que usted debe recordar que la salvación ha sido siempre por gracias mediante la fe, no por las obras de la ley. (Gálatas 2:16) (Romanos 4:3, 6-8, 16), Jesús vino a buscar y salvar a los perdidos (Lucas 19:10), vino para que el mundo fuera salvo por él (Juan 3:17). Proclamó el evangelio de la salvación, Su evangelio es el único mensaje que hemos de predicar, cualquier otro evangelio está bajo la maldición de Dios. (Gálatas 1:6-8)

Entonces mis amigos, los «carnales», son aquellos que para empezar su vida está llena de emociones y no de compromiso, viven inclusive trabajando en un ministerio, pero su vida es igual a los de afuera, entonces eres tibio y me imágino que sabe que le pasará a todos los que somos tibios, exacto. Pero le voy a dejar una tarea, que con el hecho de leerla, se le van a parar los pelos, hay gente que cree en Jesús como Salvador y Señor, (¿vamos bien?) bueno pero muchos quieren separar estas dos palabras, aceptan que Jesús es el Salvador y que nos ha dado la vida eterna y que si oramos en su nombre recibiremos todo aquello que pedimos, que podemos hechar fuera demonios, que haremos milagros y bueno un sin fin de cosas, pero no quieren reconocer a Jesús como «Señor», (¿lo duda?, se lo pruebo), Señor significa amo, esto lo hemos visto muchas veces, le voy a hacer unas preguntas ¿qué tan grande es su compromiso con Cristo? está usted dispuesto a dejarlo todo por seguirlo ¿seguro?, y entonces podemos contar, que usted por lo menos ha predicado la Palabra a unas cuantas personas esta semana, usted líder está  discípulando a miembros de su congregación y ya ha formado, hombres que hablen la Palabra en las casas, ¿cierto? o es usted el buen Samaritano que me va a ayudar a pagar los juguetes de mis hijos, gracias, ya tengo una tarjeta más), ¿y, porqué no llegan a la congregación, es por timidez, bueno usted líder está haciendo la obra para lo cual fue llamado, «pastoreando sus ovejas», ¿cuántos años lleva en SU ministerio y todo lo que hace es eso? ¿a cuántas personas le ha hablado de Cristo?, viene, cumple y se va con la satisfacción del deber cumplido, cree usted ¿qué eso es ser discípulo de Cristo? y se nos va al cielo con zapatitos y todo, use botas de mecánico duran más al quemarse, pero mi amigo creemos que porque servimos al Señor en un Ministerio ya la hicimos, Pablo era apóstol, no estaba ni en panderos, ni el power point, ni en la ofrenda, entre otros lugares en donde vegetamos sudorosos por la responsabilidad que tenemos, ante el pastor, ante los hombre, pero no ante Dios, predique, hable a tiempo y fuera de tiempo, socorra alas almas perdidas, sane heridas del alma, cubra necesidades, (pero ojo no a los mismos cristianos de siempre) ¿a cuántos? yo llevo casi un año y solo me han llamado para pedirme, que vaya a grabar un servicio, aunque bueno si está leyendo estos post, no van a querer reunirse conmigo, ¿porqué?, bueno, dejémoslo así, y si, mis amigos, muchos pastores y maestros y bueno les voy a dar la teoría de la duda, lo hacen por desconocimiento, bueno pero una, no puede separarse de la otra, la Salvación esta ligada al Señorío, de nada te sirve repetir una oración en donde aceptas a Cristo como tu Salvador, sino llegas a reconocer que Jesús es el Señor, y dueño de tu vida, y no venir a decir no importa total Dios perdona, y cada domingo lo mismo, entonces toma tu ostía y vamonos la palenque.

Por último y ya para terminar, he visto que nos falta compromiso, no con el pastor, sino con Dios, y muchas veces es porque vivimos igual que los demás, no hay ese fuego que reaviva el alma moribunda solo hay esa llama que mueve las emociones que no sirven para hacer la obra de Dios, «tremendo mensaje» pero y luego ¿qué?, allí quedó, por lo que como siempre digo, líderes, aquí estoy, quizás con menos tiempo, pero siempre dispuesto, para estudiar, deseo conocer más de Dios, deseo conocer a Jesús, pero no para pedirle que estire mi cheque, ni me regale un carro, ni me arregle mi muela careada, porque es quien es, y sé que necesito muchas cosas materiales y salud, pero por encima de todo ello: «el conoce mi necesidad y si mi prioridad es El, entonces todo mis necesidades serán cubiertas, pero ojo necesidades, no hablo, del nuevo iPad, mucho menos de mi viaje a España, ni siquiera del viaje a Disney, si no puedo pagar luego mi renta, no, mucho menos ese nuevo computador que esta saliendo iMac, «Señor tu sabes que es para expandir el reino tuyo», (mentiras) lo suficiente como para vivir, para que mis hijos sin hambre lleguen a la escuela, abrigados si hace frío, en donde pueda arrodillarme y darle gracias, porque hoy me permitió acercarme a él, y abrir mis ojos por la mañana, aún con dolor, aún, con frío, aún temblando por la fiebre, gracias, por que te puedo seguir llamando «Mi Señor»,  porque derrepente si me dás todo lo que deseo, me lleno de orgullo y te desconozco, y eso no lo puedo permitir, bendiciones y nos vemos muy pronto, quizás más por este blog porque en mi congregación (bueno lo de mía es una fábula) ya estoy creo yo en los minutos extras del partido, bendiciones, y Amén.

¿Qué te detiene para ser un buen cristiano?

Queridos amigos, ya estamos aquí, hoy con un tema interesantísimo, y es que hace unos días me invitaron a llevar un estudio bíblico, (nadie es profeta en su tierra) pero me dierón el tema: razones por las cuales no nos comprometemos con Dios, y bueno me puse a estudiar mi Bíblia y algunos comentarios bíblicos y hoy transcribo parte de ese estudio bíblico, trataré de reducirlo o resumirlo para que no se alargue mucho este artículo, veremos lo que sale, por lo cual mi amigo o hermano en Cristo, como siempre corra por su Biblia, preparese un buen café, cargado para que no se nos duerma y luego tome asiento en su mejor sillón y empecemos, no sin antes advertirle de que debe leer su Biblia por dos veces para entenderla y comprenderla. (Hablaremos de Génesis capítulo 31, lea desde el 30 hasta el 32, si no fuese molestía, y si lo es, pregúntese, si es cristiano, porque cristiano que no conoce la Palabra de Dios, es que no puede llamar a Jesús: Señor, y si no puede llamarlo Señor, es que usted no es criatiano, dediquese a otra cosa, quizás le vaya de otra forma, gracias).

Me imágino que usted conoce toda la historia de Jacob, lo que paso con el plato de lentejas, su huída porque su hermano Esaú lo buscaba para matarlo, por haber tomado su puesto y recibir la bendición de su padre en vez que Esaú, y haberse casado con dos hermanas porque su tío Labán lo engaño, pero mi amigo un día Dios habló con él y allí empieza nuestra historia.

«También Jehová dijo a Jacob: Vuélvete a la tierra de tus padres, y a tu parentela, y yo estaré contigo» (Génesis 31:3)

Bueno mi amigo por aquí empezamos, cuando Dios habla, debemos de escuchar y obedecer, en este caso Jacob estaba dispuesto a obedecer, aunque sabía que su tío Labán no lo dejaría ir tan fácilmente y que al regresar a la casa de sus padres, estaría esperandolo su hermano Esaú para matarlo, pero vamos a ver que cosas se oponían para que Jacob obedeciera a Jehová, si usted recuerda «He aquí, yo estoy contigo, y te guardaré por dondequierra que fueres, y volveré a traerte a esta tierra: porque no te dejaré hasta que haya hecho lo que te he dicho» (Génesis 28:16), Jacob tenía una promesa de Dios, pero veamos, cuando se encontró con su tío Labán y conoció a Raquel, trabajó siete años por ella y encima su tío lo engañó y le entregó a Lea y por otros siete años trabajo por Raquel, sabe cuál es uno de los impedimentos para obedecer a Cristo, «el temor» Jacob a pesar de ser mentiroso, engañador, era un hombre temeroso, no pudo enfrentarse a su tío Labán cuando en vez de Raquel le entregó a Lea, tenía miedo de su tío, pero mi amigo y hermano en Cristo, ya no recordaba que Jehová le dijo que «Te guardare por dondequiera que fueras» si tu mi hermano o hermana obedeces a Dios, él te guardará a donde quiera que vayas, pero la obediencia debe de ser total, sin preguntas, sin el popular «pero» y tenemos miedo de lo que puede decir el mundo de nosotros, «mira al cristianito» tenemos miedo de perder amistades, hasta el trabajo o la posición en que nos encontramos, muchas veces nosotros tenemos miedo de confiar en Dios y preferimos seguir las filosofías del mundo, ese temor que nos hace esconder la Biblia, el no hablar ni decir que somos cristianos, el no levantarnos y decir soy cristiano y por lo tanto no puedo aceptar cambiar a Dios por tortillas duras y frias o sea no puedo cambiar a Dios por las cosas que me da el mundo ni mucho menos por sus placeres, inclusive.

«Y Jacob engañó a Labán arameo, no haciéndole saber que se iba» (Génesis 31:20), o sea que siguió engañando y mintiendo, mi amigo eso es temor, un miedo inmenso a decir que seguimos a Cristo y que vivimos en obediencia y por esa razón aunque estamos en el mundo no hacemos las cosas del mundo, y entender bien de que aunque el mundo se ha metido en la iglesia de Jesucristo, nosotros sabemos ver la diferencia, porque estamos en obediencia a Jesucristo y si eso es verdad en nuestra vida, el Espíritu Santo, no revela y podemos separar la verdad de la mentira, y porque sabemos la verdad no podemos seguir las filosofías de declarar, visualizar, atar, pisar, ordenar, pero mi amigo, el temor nos puede hacer escondernos y huir como lo hizo Jacob, jamás dar la cara, si en tu corazón tienes a Jesús, él jamás te desemparara, Dios sabe quienes estan en tu contra, quienes quieren tu mal y si tu estas en obediencia, Dios estará contigo y te guardara en el día malo. Y los primeros que se opondrán a que sigas a Jesús, pueden estar dentro de tu propia casa, Labán quería que Jacob le siga sirviendo y con engaños tratara de convencerte, apelará a la familiaridad, al amor, pero podrás ver que en su corazón, asi como en el corazón de algunos de tus familiares, que solo hay celos, envidias, y contiendas para contigo. Envidiarán lo que tu sabes, lo que tienes, lo que tu eres, pero siempre debes entender que si estas en obediencia a Dios, él pondrá las cosas en su real nivel y aunque las cosas las veas color de hormiga, él está viendo por tí.

Entonces el temor es algo que nos aleja de Dios o no permite que nos acerquemos, el mundo y sus placeres es otro punto, porque nos gusta que las cosas nos salgan bien, y muchas veces estamos dispuestos a hacer cualqueir cosa para ganar o triunfar, aunque esas cosas no sean las más correctas, estamos dispuestos a engañar a mentir e inclusive algunos hasta matar, recuerde a Jacob todo lo que hizó para recibir la bendición de su padre en vez de su hermano Esaú y lo suplanto, pero cuando Dios está contigo, las cosas más increíbles suceden y luego que existe un verdadero encuentro con Dios, él hace que seamos triunfadores como Jacob que todo lo que hacía le salía bien y se enriquecía, pero igualmente las riquezas, causan envidia dentro de aquellos que más cerca a tí se encuentran, otro problema es que dentro de la casa no haya honestidad, Raquel aún pertenecía a todo aquello que Dios odia, la idolatría, le robó sus idolos a su papá, y en medio de engaños no se los devolvio cuando su pabre Labán vino a buscarlos, usted recordará, que luego que Jacob huyó, pasarón varios días para que Labán le diera alcance y estaba dispuesto a quitarle todo e inclusive matarlo.

«Poder hay en mi mano para haceros mal» (Génesis 31:20), pero usted debe saber mi amigo que si usted lucha por hacer la voluntad de Dios, sin importar las consecuencias, Dios cuidará de usted, hagasé usted una pregunta: ¿cuándo fue la última vez, que verdaderamente confié en Jehová? o quizás ¿alguna vez confié totalmente en Jehová?, por la noche Dios le habló a Labán y las cosas cambiaron, pero Labán aún quería sus idólos, la gente mira, sabe de Dios, escucha de Dios, sueña, pero sigue con sus propios dioses, e idólos, muchos cristianos, creen en Dios, pero también tienen sus dioses, aunque usted no lo crea, su trabajo, sus hijos, su esposa, e inclusive sus santos, si mi amigo también tenemos santos, e idolos de barro, y creemos en el trapito sanador, en la soga milagrosa que ata demonios, en el agua bendita que limpia todos los pecados, e inclusive el aceite mágico que unge a la gente y que sin ese aceite no podemos hacer nada, que este método o aquel, que los clavos de Cristo, con los que crucificarás tus pecados, y asi tantas cosas que nos parecemos a esos sacerdotes que inventaron cientos de leyes a seguir para poder entrar al cielo, ahora hay cada cosa que verdaderamente Dios nos tiene que azotar porque hemos convertido la casa de Dios en un merdado desde la pupuza, pasando por el pollito y el perfume y tu zumba para bajar de peso y todo en el nombre de Dios y bendecido por su Hijo.

Aún mi amigo cuando paso lo de Labán, cuando al final se va a encuentrar con su hermano Esaú, sigue tratando de hacer cosas en sus fuerzas, separa a su familia, a sus animales, sus sirvientes, sin entender que Dios tiene todo bajo control, solo cuando Jacob se enfrenta a un varón, recordara el punto, reconoció quién era, un sinveguenza, un mentiroso, un hombre de doble animo, pero Dios no lo abandonaba, como a tí, si en tu corazón y en tu vida estas dispuesto a obedecer a Dios, porque Jacob dijo algo que deberíamos obtener y perseguir todos «Vi a Dios cara a cara, y fue librada mi alma» Dios te cambiará el nombre, te llamará «su hijo» él te llamará, no te autollamaras, como ahora que aparecen, pastores, maestros, profetas, pero hablan sus propias fábulas y sus propias mentiras, porque como dice la Biblia, «hablan, pero Dios nunca les dijo».

Recapitulando y para terminar, el temor, el mundo y sus placeres, la familia, inclusive tus supuestos hermanos en Cristo, pueden impedir que obedezcas a Dios, pero tú debes de buscarlo, su Palabra debe ser tu eterna compañera, y sobre todo tener siempre en mente que la obediencia hace que Dios pueda llamarte «buen siervo y fiel, pasa».

Nos vemos, he tratado de resumir un estudio de más de una hora en lo que usted lee ahora, y sabe mi hermano y hermana, la obediencia es parte fundamental en su caminar cristiano, de lo contrario, aún si salte, brinque, grite, declare positivo, Dios no movera un dedo por usted.

Ahora es buen tiempo para empezar por el arrepentimiento de su vida pasada, reconozca que ha pecado contra Dios, el no buscarlo, el creer que pedir, exigir, saltar, atar, fueron pecados del pasado, que desde hoy inciará una busqueda de la verdad en obediencia a Su Palabra, en el nombre de Jesús. Bendiciones.

Adoración: Orando delante del Padre

Volvemos, pero mi hermano haciendo un tiempo en el camino nos pusimos a adorar, para lo cual quisiera compartirles este canto, es de la congregación Casa de Oración de Guadalajara, puede usted levantar las manos, puede usted adorar a Dios, pero lo que no puede es cerrar los ojos, para simplemente no adorar a su creador, nos vemos luego, y empezaremos un estudio sobre porque no somos buenos cristianos comprometidos con la obra, espereme, ya vuelvo.

Bueno mis amigos y hermanos, nos vemos en un rato más, cuidese y bendiciones.

Discípulo, discípulado ¿qué es eso? (2da. parte)

Regresamos, mi amigo seguimos, para lo cual, tome su Biblia, vamos a leer algo importante y como siempre (soy partidario del café, pero del bueno) compre un Starbucks, nuestro inseparable (por lo menos hasta que se nos acabe, la mermelada de durazno) y pongase comodo, sientese, no se duerma y preparese porque lo que vamos a conversar le atañe a usted directamente.

«Padre la hora ha llegado; glorifica a tu Hijo, para que también tu Hijo te glorifique a ti; como le has dado potestad sobre toda carne, para que dé vida eterna a todos los que le diste. Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado. Yo te he gorificado en la tierra; he acabado la obra que me diste que hiciese. Ahora pues, Padre, glorifícame tú al lado tuyo, con aquella gloria que tuve contigo antes que el mundo fuese. He manifestado tu nombre a los hombres del mundo que me diste; tuyos eran, y me los diste, y han guardado tu palabra. Ahora han conocido que todas las cosas que tu me has dado, proceden de ti; porque las palabras que me diste, les he dado; y ellos las recibieron, y han conocido verdaderamente que salí de ti, y han creído que tú me enviaste. Yo ruego por ellos; no ruego por el mundo, sino por los que me diste; porque tuyos son» Juan 17:1-9, pero podría también poder seguir leyendo todo el capítulo y que verdaderamente de cada versículo podríamos hacer todo un estudio bíblico.

Pero mi hermano, sabe el Padre le entrego a nuestro Jesús, (deseo que preste atención), aquellos hombres que serían los pilares de nuestro cristianismo, y vea la oración que realiza Jesús, «te he glorificado y he acabado la obra que me diste que hiciese», durante el tiempo que vivió Jesús entre nosotros realizó la obra de preparar a los santos para la obra del ministerio «he manifestado tu nombre a los hombres…han conocido que todas las cosas… provienen de ti, las palabras que me diste les he dado… » todo ese tiempo formó a cada uno de sus discípulos para que hiciren la obra que el día de hoy usted y yo tenemos, formar a los santos para que continuen la obra, pero ahora quiero hacerle una pregunta, a usted mi querido pastor, o maestro, o evangelista, o profeta, o miembro de alguna congregación ¿a cuántos hombres viene formando como discípulos de Jesucristo? y la respuesta en muchos casos es:, el lunes tengo estudio bíblico, luego la reunión de varones, luego las prácticas, luego el servicio, la administración de la iglesia, las compras, el folleto del domingo, si pero ¿cuántos hombress caminan con usted para luego mañana más tarde puedan continuar la obra? y usted mi querido hermano y/o hermana durante la semana ¿recibe o asiste a un discípulado? ¿es usted discípulado por alguién?, en la mayoría de casos la respuesta es ¿para qué? es suficiente con la media hora de estudio bíblico y el servicio del domingo, ¿estamos discípulando a nuestro hermozo grupo de músicos a entender la razón por la cuál están en el grupo de alabanza? o son simples músicos que entonan entrofas sin entender el por qué elevan sus cantos al creador, por ello mis queridos amigos, aunque haya pasado mucha agua por debajo del puente, y ya pintan canas en nuestras cienes y el pelo ha sido detenido por el suelo, seguimos vistiendo pañales y tomando biberon, porque nuestro conocimiento de Dios es raquitico, creemos que por tener nuestra Biblia debajo del brazo, por inducción, se nos penetrara el conocimiento, y no estoy diciendo que te conviertas en un teologo, sino en que conozcas a Dios, porque si después de 15 años de convertido aún no sabes cuál es la voluntad de Dios para tu vida, mirate al espejo, aún vestiras pañales y tu camiseta de la abeja maya.

Discípulo significa «el que sigue a otro para aprender» aquí ¿usted a quién está siguiendo? ¿a usted pastor, cuántos lo están siguiendo? y no me venga con esa frase «no me miren a mi, sigan a Cristo», si pero usted mi amigo pastor, que debe ser ejemplo a seguir, si es que en su interior vive Jesús, desde allí usted se convertirá en un discipulador, porque tenemos la orden de ir a las naciones, predicar el evangelio y hacer discípulos, Mateo 28, esta es una orden a todos los cristianos, y entonces el inicio es ser discípulo, luego discípular, pero si no seguimos ese camino, la razón para la cual Dios te salvo no se esta haciendo realidad, porque estas desoyendo la orden dada por Jesús, y mira es bueno ir a congresos y conciertos, que mueven tus sentimientos, pero si al día siguiente de que lloraste, te arrodillaste, toda tu vida vuelve a la misma inamovilidad de antes, es que solo fue emoción y de emocionales esta poblado el infierno, y es bueno emocionarse, si, lloramos por el dolor, gritamos !GOL!, por la euforia, pero si solo paramos de congreso en congreso y de emción en emoción, es que la muerte de Jesús fue en vano, nada ha cambiado en nuestras vidas, somos mejores personas, pero no somos discípulos de Jesucristo, aún llegando a la iglesia cada domingo y sirviendo en algún ministerio, estamos fuera del plan de Dios.

Un discípulo es aquel que sigue a otro para aprender, el discipulador es aquel que instruye a otros a traves de las enseñanzas bíblicas y también a traves de nuestra propia vida para llevarlos al final a tener el caracter de Cristo, Dios nos salva para que demos fruto, porque cuando tu y yo mi hermano lleguemos al cielo por la gracia de Dios, no nos va a preguntar, ¿cuántas campañas  tubiste? o, a cuántos conciertos asististe o a cuántos hombres les hiciste milagros, u oraste por su carro, o cuántas iglesias construiste, te mirara y te peguntara ¿cuánto del carácter de Cristo tienes en ti?

Un discípulo es aquel que ha decidio seguir a Cristo para aprender de él, debes entender y decidir que Jesús es el único que te puede dar la vida eterna, en donde se encuentran concentrados toda la sabiduría y el conocimiento, que no basta con decir que crees en Jesús y que resucitó de los muertos, porque recuerda hasta los demonios creen, sino que Cristo nos invita a que lo sigamos, pero todos los días, a cada momento, el centro de nuestra vida debe ser Cristo, solo así puedes llamarte discípulo de Cristo, entonces seguir a Cristo significa abandonar todas tus ideas, todos tus propósitos, dejar de lado todo aquello que te separa del creador de la vida.

Por ello recuerda estos versículos «A éste abre el portero, y las ovejas oyen su voz; y a sus ovejas llama por nombre, y las saca. Y cuando ha sacado fuera todas las propias, va delante de ellas; y las ovejas le siguen, porque conocen su voz» (Juan 10:3-4). Los que son verdaderamente cristianos, oyen una sola voz, la voz de Jesús, tengo pregunta ¿cuántas voces oyes tu? que a la primera llamada a hacer la voluntad del Padre, te haces el sordo, muchas veces oímos nuestra propia voz que es la de nuestra voluntad, y hacemos oídos sordos a las palabras de Jesús, y sabe nosotros tenemos en nuestras manos de tomar la desición a quien seguir.

Un discípulo también es aquel que desea mantenerse en la verdad, dígame otra pregunta: ¿tiene usted un devocional? ¿cuánto tiempo le dedica usted a leer su Biblia y tiene una relación con el Padre? y no hablo de las oraciones por los alimentos, sino una verdadera relación, recuerda lo que los discípulos le dijeron a Jesús fue «enséñanos a orar» no le pidieron, enseñame a atar demonios, ni a sanar, ni a hacer milagros, y es que se dieron cuenta de que la oración del justo puede mucho, porque aparte de ser justo, honesto, bueno, etc, es también estar en correcta relación con el Padre y eso hace que sus oraciones sean respondidas, en la perfecta voluntad de Dios. Muchas veces pedimos que el poder de Dios descienda en la congregación, y amigos, no es para pedir milagros, carros, dinero, es para que la gloria de Dios viva en nuestras vidas, y tendremos poder para pararnos en las plazas y predicar el evangelio, para hablar en lenguas y orar en el espíritu, para poder tener el poder de liberar a los esclavizados por el pecado, para abrir las carceles de aquellos que se encuentran encerrados a sus propias vaniades, para eso es el poder y no para que te traigan tus papitas y pastel de helote para desayunar, o para saber cuales son los números de la loteria y hacerte rico y fugarte a las Bahamas.

Juan 8:31-32 «Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos; y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres», entonces viene la mala noticia, miles de personas que vienen a las iglesias, que estan los domingos levantando sus manos, que inclusive son parte del liderazgo, pastores, maestros, ujieres, profetas, y demás, puede ser de acuerdo a este versículo, que no sean discípulos de Jesucristo, porque la emoción les dura el mismo tiempo que dura el servicio o el estudio o la alabanza y después vuelven a su vida diaria en donde la relación con Dios es de domingo en domingo, y en donde no existe una busqueda de la verdad, ni mucho menos de Dios. Y cuando se les dice que debemos reunirnos para buscar de Dios, no tienen tiempo, como hace unos años varios pastores (unos seis) dijeron que no tenían tiempo para eso, que la administración de la iglesia, la visita a los hermanos, la reunión de jovenes, la práctica de la alabanza, les tomaba mucho tiempo, y no lo tenían como para perderlo de esa manera, y así decimos que venimos haciendo la voluntad de Dios. Y ojo mi querido amigo y ya para terminar, te voy a dejar con algo que debe de hacerte pensar y en especial a ti te lo digo, amigo lider, «para conocer la verdad, tienes que ser discípulo de Jesucristo» de lo contrario eres asistente, hincha, amigo, y puedes creerte de que eres discípulo y de que conoces y vives la verdad, pero te engañas, volvamos a leer nuevamente los dos versículos por favor:

«Si vosotros permaneciereis en mi palabra; seréis verdaderamente mis discípulos» o sea si la concoes, si la pones en práctica en tu vida, recien puedes ser llamado, o sea, día a día, buscas de Dios, y caminas en Su Palabra, «y conoceréis la verdad», por favor presta mucha atención, de tu comprensión de esto depende tu futuro, si verdaderamente buscas de Dios, y haces su voluntad, serás llamado su discípulo, y allí en ese momento conoceréis la verdad, y serás libre, no antes, no por asistir, no por llorar, ni por arrodillarte. Solamente por ser discípulado y cada día parecerte más a Cristo, todo alumno debe tener un maestro, para que el Señor pueda decir como al principio del post, «a los que me diste, les he manifestado tu nombre.. han guardado tu Palabra, las palabras que me diste, les he dado y ellos la recibieron y te han conocido…»

Mi amigo y hermano, debemos de empezar o seguir en nuestro caminar siendo discípulos, seguir a aquellos que nos enseñarán todo aquello que Jesús nos ha dado, para que nosotros lo demos a todos aquellos que Dios nos ha dado, que el fruto no se pierda por nuestra falta de compromiso, y ahora si los dejo, solamente pidiendo al altísimo, «Señor vuelve a llamar, quizás por mi vida de correrías, cerraba mis oídos cuando llamabas, perdóname, pero hoy me levantare a buscarte, a aprender de Tí y convertirme en tu discípulo, para poder conocer la verdad que hasta hoy me ha sido oculta y he creído en mis propias fábulas e ideas, pero mi Señor, quiero ser libre de ataduras, de la esclavitud del pecado, gracias Señor, y aquí estoy dispuesto a seguirte.

Bendiciones mis queridos hermanos y hermanas, nos vemos, y recuerde, «para que dé vida eterna a todos los que me diste» (Juan 17:2), que entre ellos estemos usted y yo.

Spurgeon y el declive de la iglesia

Queridos amigos, para que no digan que solamente yo estoy medio loco, o loco completo, que camina diciendo que las cosas van mal en la iglesia de Jesucristo, bueno aquí les dejo un sermón del pastor Charles Spurgeon, que hace mucho más de 150 años se dió cuenta de que las cosas caminaban mal en la iglesia y lo declaró, lo gritó a los cuatro vientos y como siempre fue señalado de divisionista, de equivocado, de loco, y hoy se vuelve a repetir la historia o mejor dicho la historia continúa, como si fuera una novela de terror, por lo cual, hoy más que nunca este sermón es actual, por lo que se los dejo, leánlo con atención, especialmente si usted es un líder, pastor, maestro, profeta (?), de esos que nunca faltan, que vienen haciendo las cosas al revés, pero tome asiento, un café sin azucar, porque la vida se le va a amargar cuando termine de leer todo este post y lo compare con lo que viene haciendo desde hace mucho tiempo en su congregación, por lo tanto hoy le pido que se arrepienta y busque del Señor, los dejo.

Nunca debemos esconder nuestros colores. Llegan tiempos en los que debemos pasar al frente y responder a la iniciativa de combate, cuando vemos que el honor de nuestro Capitán lo demanda. Nunca debemos sentir vergüenza ni temor. Nuestro Señor Jesús merece que nos rindamos como sacrificios voluntarios en defensa de su fe. Comodidad, reputación y hasta la vida misma deben capitular al nombre y la fe de Jesús. Si en el ardor de la batalla nuestro buen nombre o nuestra vida deben arriesgarse para ganar la victoria, digamos entonces: “En esta batalla algunos de nosotros deben caer, ¿por qué no? Estoy dispuesto a tomar parte y fortuna con mi Maestro y a soportar el vituperio por su causa”. Los soldados valientes son los únicos dignos de nuestro gran Señor. Los que se esconden en la retaguardia para estar cómodos todo el tiempo, no son dignos del reino.

Hermanos, debemos estar dispuestos a ser ridiculizados por causa de Cristo, incluso la clase peculiar de ridículo envenenado que tanto le gusta a “los cultos” verter sobre nosotros. Debemos estar dispuestos a ser considerados como grandes tontos por causa de Jesús… Por mi parte, yo estoy dispuesto a ser diez mil veces tonto por mi amado Señor y Maestro, y cuento como el honor más elevado que se me puede conceder el ser despojado de toda honra y ser cargado con todas las censuras por la causa de la antigua y gloriosa verdad que está escrita para siempre en mi corazón… Antes que yo pueda renunciar a mi fe… voy a tener que ser pulverizado, y todos los átomos que queden deberán ser transmutados.

Todos admiran a Lutero, sí, claro; pero nadie quiere que alguien más haga lo mismo el día de hoy. Los que van al jardín zoológico admiran al oso, pero, ¿le gustaría tenerlo suelto en su casa o deambulando por las calles? Algo tan “osado” le resultaría insoportable a cualquiera. De modo que admiramos a un hombre que se mantuvo firme en la fe hace unos cuatrocientos años; el pasado es para él como una especie de fosa o jaula de hierro que le mantiene asegurado tras las rejas como al oso en el zoológico: tener a un hombre así en la actualidad sería una gran molestia y todos estarían a favor de la captura y encierro de ese fanático recalcitrante y obcecado o un apelativo todavía peor que se pueda pensar. No obstante, imaginemos por un instante que en el pasado. Lutero, Zwinglio, Calvino y sus camaradas hubieran dicho: “El mundo está en desorden total, pero si tratamos de arreglarlo solo crearemos perturbación, vamos a quedar mal con la gente y caeremos en la deshonra. Mejor vamos a nuestras recámaras y nos ponemos a dormir durante los tiempos malos; quizás al despertar hayan mejorado un poco las cosas”. Tal conducta por parte de ellos nos habría dejado un legado de errores. Cada generación caería cada vez más bajo en los barrancos infernales y los fangales pestilentes del error nos habrían tragado a todos. Estos hombres amaban la fe y el nombre de Jesús en demasía y no estuvieron dispuestos a contemplar cómo eran pisoteados. Estamos obligados a reconocer lo que debemos a ellos, y pagar a nuestros hijos la deuda que tenemos con nuestros padres.

Hoy sucede lo mismo que en los días de la Reforma. Se necesita un espíritu resuelto y decidido. Ha llegado el día para el hombre; ¿dónde está el hombre para el día? Más nos vale a nosotros, a quienes el evangelio ha sido transmitido por manos de mártires, que no lo tratemos con trivialidad ni nos quedemos ahí sentados oyendo a traidores negarlo mientras aparentan amarlo cuando por dentro aborrecen todas sus palabras. La fe a la que estoy aferrado está marcada con la sangre de mis antepasados. ¿Acaso voy a negar su fe, por la cual fueron forasteros en este mundo? ¿Acaso vamos a arrojar por la borda el tesoro que nos fue entregado a través de rejas de cárceles o que llegó pasado por las llamas de Smithfield?

En lo personal, cuando mis huesos han sido torturados con reumatismo he recordado a Job Spurgeon, sin duda alguna de mi propia simiente, a quien le fue permitido en la cárcel de Clemsford tener una silla, puesto que no se podía acostar debido al intenso dolor reumático. Los sufrimientos de ese cuáquero fueron mayores que los míos, pero no lamento haber heredado su reumatismo si también poseo su fe obstinada, la cual no me dejará ceder una sola sílaba de la verdad de Dios. Al pensar en cuánto han sufrido otros por la fe. una desatención o injuria menor parece baladí y no es algo digno de mención. Una estirpe de ancestros amantes de la fe debería ser motivo suficiente para permanecer en la obediencia al Señor Dios de nuestros padres y la fe en la cual ellos vivieron. En cuanto a mí, debo aterrarme al antiguo evangelio: no puedo hacer otra cosa. Con la ayuda de Dios soportaré todas las consecuencias de lo que según los hombres es pura obstinación.

Caballeros, miren esto con cuidado: quedan generaciones por venir. Si el Señor no aparece en la nuestra, vendrá otra generación, y otra después de ella, y todas estas generaciones serán perjudicadas y dañadas si no somos fieles a Dios y a su verdad hoy mismo. Hemos llegado a un punto decisivo en el camino. Si volteamos a la derecha, puede ser que nuestros hijos y los hijos de nuestros hijos irán por ese camino; pero si volteamos a la izquierda, generaciones que ni siquiera han nacido maldecirán nuestros nombres por haber sido infieles a Dios y a su Palabra. Yo les encargo con solemnidad, no solo por nuestros ancestros sino también por la posteridad, que procuren ganar los elogios de su Maestro, que a pesar de vivir en medio del lugar donde mora Satanás, se aferren al nombre del Señor Jesús y no nieguen su fe. ¡Que Dios nos conceda ser fieles por causa de las almas que nos rodean! ¿Cómo se va a salvar el mundo si la iglesia es falsa con su Señor? ¿Cómo vamos a levantar a las masas si carecemos de medios para ejercer influencia? Si nuestro evangelio es incierto, solo quedan miseria y desesperanza. Manténganse firmes, amados míos, ¡en el nombre de Dios! Yo, su hermano en Cristo, les ruego que permanezcan en la verdad. Condúzcanse como hombres y sean fuertes. Que el Señor les sustente por amor de Jesús. Amén.

Bueno mis amigos, lo único que queda es orar: Señor, perdóname, pero empésare a luchar para que tu muerte por mi, no haya sido en vano, Señor, de Ti tendré las fuerzas para seguir, para caminar de frente y con la frente en alto, arrepintiendome de mis pecados, sabiendo que estoy haciendo la obra para la cual Tu me llamaste, gracias, mi Dios, hermano y amigos, permanezcamos en la verdad, pero para permanecer, hay que conocerla y para conocerla hay que estar junto a quién es el dueño de la verdad, y para ello debes convertirte en su discípulo. Nos vemos mañana, domingo, a las 9 el sevicio mañanero y luego a las 2 de la tarde continuamos en la congregación que me vengo reuniendo hasta que me inviten a seguir mis pasos, pero seguiremos desde está tribuna, en fin, bendiciones y eso si le prometo, seguimos.

Si Jesús es tu Señor, es que tú eres su esclavo

Queridos amigos, hermanos, hermanas, visitantes, miembros de la congregación «Manantial de vida» nos volvemos a encontrar, y si es la primera vez que nos visita, espero que sea miembro del equipo de estudiantes de la Biblia o por lo menos de buenos cristianos. Hoy no voy a hablar (o escribir mucho) solamente un pedido o ruego, vea y escuche o lea la traducción de el video en forma completa, le aseguro de que si usted verdaderamente desea en su corazón seguir a Jesús, algo va a cambiar en su interior, tenemos ideas sobre lo que es ser cristiano, algunas de ellas medio atravesadas o raras, que muchas veces es lo que nos enseñan desde los púlpitos o en las clases bíblicas, y que nada tienen que ver con la Palabra de Dios, por ello el deseo de mi corazón es que usted y muchos más, verdaderamente sepan y comprendan lo que es ser un cristiano, lo que es convertirse en discípulo de Jesucristo. Los dejo.

Espero mi amigo, que hoy cambie su manera de pensar y siga verdaderamente las pisadas del maestro, su amo y Señor.

Bendiciones y nos vemos.

La voluntad de Dios, ¿qué es?

Regresamos, bastante rápido, y con una pregunta que medio mundo se la hace, hasta los que no son cristianos, ¿cuál es la voluntad de Dios para mi vida?, usted ¿no se ha hecho alguna vez está pregunta?, muchos saben, creen, entienden de que Dios tiene un plan para la vida de todo creyente, pero muchas veces hay un pequeño problema al poder determinar ¿cuál es ese propósito?, pero mi amigo, le aseguro de que las respuestas que usted puede escuchar, lo pueden hacer reir, llorar, y hasta enojarse (no lo haga, es pecado).

Uno puede buscar pautas definitvas en esta érea, pero siempre acabara con una infinidad de ideas a cada cual más atravesada. algunos, los más pesimistas, piensan que han perdido la voluntad de Dios, o por lo menos dicen que la están buscando, Para ellos, Dios debe parecerles que está participando en un juego de niños, en el que se ha escondido, su voluntad en algún lugar donde no se ve y nos mantine corriendo a través de la vida para que tratemos de encontrarla. Y él está en el cielo diciendo: «Estás cerca, estás cerca, caliente, caliente…»

Otros, esos espiritualoides, sugieren que la voluntad de Dios, debe encontrarse a través de una experiencia traumática. Voy por la calle, piso una cascara de plátano y me caigo sobre un mapa de la India, e inmediatamente le digo al Señor: «Gracias por guiarme con claridad. !Comprendo! !Es la India!». O siempre hay una voz del cielo o una visión en sus sueños que le dice que se vaya a Qatar. O esos profetas que en medio de un servicio o en los baños recibe la revelación de que debemos vestirnos de rojo por similitud a la sangre de Cristo, en fin ideas que algunos hermanos se lo creen.

También están aquellos que en realidad le tienen miedo a la voluntad de Dios. Porque creen que Dios, les rompera las piernas, o les quitará sus pertenencias, o los mandará al desierto a comer hormigas, y piensan que Dios es un aguafiestas, acabando con la diversión de todos y achándoles a perder su gozo. La gente que tiene este punto de vista teme en realidad que la voluntad de Dios sea una manera severa de vivir que demandará el sacrificio de sus habilidades o posesiones más preciadas.

Hay cristianos que ven la voluntad de Dios como que si ganó bien, pero si no gano esta bien también, o sea no corras para ganar, solo hazte presente en la carrera y ya la hiciste.

Pero mi amigo, ¿cuál es la voluntad de Dios?, bueno aquí vamos sientesé y con Biblia en mano, y sentadito para que no se nos caiga veremos. Comencemos con una suposición sencilla. De que Dios tiene una voluntad específica para nosotros, entonces él debe querer que nosotros la conozcamos. De ser así, entonces podríamos esperar que él nos la comunicara de la manera más obvia. ¿cómo? A través de la Biblia, su revelación. Por lo tanto, creo que lo único que necesita saber acerca de la voluntad de Dios se ha revelado claramente en las páginas de la Palabra de Dios. La voluntad de Dios es, de hecho, muy explícita en las Escrituras.

A medida que veamos unos principios bíblicos en los post que iremos escribiendo en los siguientes días, nos daremos cuenta de cual es la voluntad de Dios, pero prepárese, quizás, no este preparado para aceptarlo. Nos vemos luego, yo creo que ya mañana, porque deseo que asimile lo que ha leído y sobre todo levante sus manos y alabe a nuestro creador, recuerde lea, estudie, no se conforme con los cuatro versículo del domingo, ni los dos o tres del estudio bíblico, hoy he tratado algo escrito por el pastor John Macarthur, que pienso que es uno de los pastores que mayor estudio de la Biblia tienen y de que buscan verdaderamente del Señor, por lo que es bueno leer lo que escribe, si encuentra un libro de él, tome su Biblia y empiece a leerlo, bueno nos vemos y bendiciones.

Te ato, te encadeno y te arrojo al lago profundo, ¿Si, quién, tú?

Queridos amigos, venimos de nuevo, nos fuimos a tomar un buen café Starbucks, un pastelito de manzana y sobre todo un tiempo de buena lectura, paz y tranquilidad, pero seguimos estudiando y escribiendo. Como le comentaba en otro post, en estos tiempos cuando en el mundo cristiano se nos ha inculcado tanto el «tener éxito», «tomar las naciones», «atar a los demonios», «ser prospero», «gritar recíbelo», «decláralo», «visualízalo», «obtener lo que tu corazón desea», etc… y cuando las modas en unciones y revelaciones abundan y siguen aumentando, te tumban al suelo cuando oran por ti, te levantan y de nuevo al suelo, como si fueras un yo-yo, cosa que por cierto, nos hace vivir afligidos como esperando que algo de lo mencionado anteriormente nos haga realmente felices y la verdad es que hasta se nos hace raro vivir así, cuidándonos de que el diablo no nos haga nada, que tenemos la autoridad para que las puertas se nos abran, de que vivamos sanos y prosperos, de que el diablo nada puede hacer contra nosotros porque lo «atamos» (que dicho sea de paso, y lo digo en primero para mi mismo:  Dios tiene más poder para cuidarnos y guardarnos, que el diablo para atacarnos), vivimos con miedo, afanados, preguntándonos dónde está el «yugo fácil» que Cristo prometió, o esa vida de bendiciones que nos prometieron cuando nos convertimos. Nos han enseñado que todo cristiano debe vivir siempre sano, siempre próspero, siempre exitoso, siempre victorioso y sobre todo recibiendo todas las bendiciones que son nuestras y que debemos reclamar; y que si no es así, es porque hemos pecado, desobedecido, caído de la gracia, o porque tenemos en la repisa un muñeco de Mickey Mouse, y ni que decir si tenemos al osito Pooh en nuestro escritorio, y mi amigo si usted tiene un conejito, (con sus patitas de la buena suerte) debe amputarle las patitas y tirarlas al fuego porque son de Satanás (pobre conejito manco y cojo, ahora explicale a tu hijo, porque hiciste eso). Nos cuidamos a cada paso, NO de caminar en santidad, sino de que a lo mejor una bruja verrugosa esparció un hechizo a mis pies y tengo que contrarrestarlo con ese maravilloso amuleto que es «la sangre de Cristo» (en ningún momento creo lo anterior ni quiero parecer ofensivo, pero es que a veces nuestro cristianismo se vuelve tan fantasioso, que algunas veces tenemos tantos amuletos cristianos que solo nos falta el rosario y nuestras estampitas contra el mal de ojo). Pero hemanito, llega un momento que todos son demonios, todo está trayendo algo oculto, hay que mirar de reojo, porque todo esta mal y en cualquier esquina hay un demonio escondido, acechándonos dispuesto a atacarnos en cualquier momento si nos descuidamos, y nos volvemos medio paranoicos que todo es vivir, a la defensiva, nunca en paz, porque nos han dicho desde el pulpito que un demonio hay a cada paso, y caminamos como pisando huevos para no despertar a ninguno, en vez de llenarnos de Cristo, «resistid al diablo y él huirá de vosotros», pero tanto nos hablan desde el pulpito de los demonios que a quien hay que hacerle liberación es al del pulpito.

Satanás siempre ha querido hasta la fecha la atención para él, y aunque usted no lo crea, lo está logrando, especialmente entre el pueblo de Dios. él ya no puede estar más vencido de lo que ya está por Cristo. Pero sí puede robar tu atención.  Pablo dijo: «No ignoramos sus maquinaciones», pero le cuento mi hermanito o hermanita, al diablo ni siquiera le importa tanto que lo eches fuera o no, o que lo ates o no, o que lo mandes al lago de fuego o no, siempre y cuando tus ojos y tus cinco sentidos estén sobre él y no sobre el autor y consumador de tu fe, o sea Cristo.

Creo en echar fuera demonios, sanar enfermos y creo en un Dios sobrenatural y milagroso. Lo que no creo y es algo que ha desgastado a la iglesia en general es precisamente poner nuestra atención en los dones o mucho peor, en Satanás mismo, y no en el Creador de todo. Él ganó el derecho de nuestra sanidad, prosperidad y muchas cosas más, pero por favor leálo con detenimiento, los dones son buenos y hermozo regalo de Jesús, pero no es lo más importante, lo más importante es lo de Romanos. 8:28 en adelante, nuestro máximo propósito: ser hechos a la imagen y semejanza de su Hijo, y si para eso nos tiene que quitar la economía, lo hará (no necesariamente es disciplina por pecado), si tiene que humillarnos con una enfermedad, lo hará, porque su propósito es mucho más trascendente que nuestros pensares, debemos seguir en el conocimiento de Dios hasta llegar a la altura del varón perfecto, sin quitar nuestros ojos del amado.

Le voy a contar otra historia, pero en una iglesia a la cual asistía hace un tiempo, el pastor tenía la convicción de acabar el servicio a una hora exacta, por lo tanto a unos 15 minutos antes de que se le acabara el tiempo, contínuamente estaba mirando el reloj colgado en la pared del templo, tal fue su fijación mental que ya casi toda la congregación, justamente con el pastor, volteaban a ver la hora, un día hable con él y le dije, pastor usted sabe que una de las ideas de Satanás es: si no puede destruirnos, por lo menos es sacarnos de lo que se viene haciendo y que glorifica a Dios, y sabe, faltando unos 15 minutos para que usted termine el servicio, nadie ya presta atención, todos juntamente con usted paran viendo el reloj, ¿de qué habló? ¿cuál fue el tema de la predica?, ya no interesa, muy sutilmente, muy fácilmente, casi todos se salieron de lo que veníamos haciendo y eso es obra del enemigo, que en forma suave, sin gritos, ni saltos, nos olvidamos del motivo de nuestra reunión, y hasta se hacen apuestas si acaba a tiempo o se pasa o acaba antes, el domingo siguiente, sacamos el reloj, el pastor terminó cuando terminó, y santo remedio, y usted cree que saltando o dando de brincos, se alejaría, no tened disernimiento de espíritus, sin darse cuenta, el mismo pastor sacó a casi todos de la comunión con el creador.

Hermanos Jehová nos sigue amando y más siendo sus hijos (cosa con la que no tuviste nada qué ver: Él te engendró) Dios ama al pecador arrepentido. Todo lo que pasa en tu vida, todo, está bajo su soberanía, y es con el fin de que Cristo que vive en ti, se cumplirá todo aquello para lo cual fuiste formado. Terminamos como empezamos, con bendiciones y con nuestra Biblia en la mano, aprendiendo un poquito más cada día. Nos vemos pronto.

Tres pasos a seguir para ser creyente

Cualquiera que quiera seguir a Jesús al reino de Dios, es decir, cualquiera que quiera ser creyente, tiene que enfrentarse a tres mandameintos: 1) negarse a sí mismo, 2) tomar su cruz cada día, y 3) seguirlo. Cuesta creer estas palabras. No son agradables para el consumidor ni razonables para el que busca. El cristianismo ligero no se halla en ninguna parte. Pero este no es un pasaje oscuro, ni diferente de las demás enseñanzas de Jesús. Son principios que enseño firme y repetidamente en todo su ministerio, vez tras vez en todas las diferentes ocasiones.

La idea es que si uno quiere ser discípulo de Cristo y recibir perdón y vida eterna, debe rehusar asociarse !con la persona que uno mismo es! Usted está hastiado de su ego pecaminoso y ya no quiere tener nada que ver con esa condición caída. Y tal vez no solo consigo mismo sino también con su familia.

No es una invitación amistosa, es una advertencia: Si vienes a Cristo, tal vez las cosas en tu familia serán peores, no mejores. Puede producir una división en tu familia, como nunca antes la has experimentado. Si le das tu vida a Jesucristo, habrá un golfo impasable entre tú y las personas que no entregan su vida a El.

Recuerda usted cuando Jesús dijo: «Una cosa te falta: anda vende todo lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven, sígueme, tomando tu cruz». Jesús hizo que saliera a relucir la justicia propia del hombre y luego dejó al descubierto su amor al dinero. El joven quería que Jesús le enseñara cómo tener la vida eterna, pero Jesús le dijo que el precio era abandonar su ilusión de justificación propia y más bien reconocer que era un pecador indigno y miserable. Tenía que estar dispuesto a someterse al Señor Jesús, aun si ello significara dejar todas sus posesiones terrenales. Tal vez Jesús no lo pida, pero el requisito para la vida eterna es estar dispuesto a dejarlo todo si El así lo pide.

Seguir a Jesús no es un asunto que dependa de usted o de mí. Ser creyente no es cuestión de nosotros, no es custión de estima propia. Mas bien es cuestión de estar hastiados de nuestro pecado y de nuestra desesperación por el perdón. Es cuestión de ver a Cristo como el invaluable Salvador del pecado, la muerte y el infierno, para que voluntariamente dejemos a un lado lo que sea necesario, aun si nos cuesta nuestra familia, nuestro matrimonio y lo que sea que atesoremos y poseemos. No puede ser más claro que esto: Si usted trata de aferrarse a sí mismo, a su plan, a su agenda, a su triunfo, a su autoestima, pierde el perdón y el cielo.

Si quiere seguir a Cristo hasta el cielo, este es el mensaje: Niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígalo. ¿Oye esto en el evangelio contemporáneo? ¿Alguna vez oye esto en el mensaje que da algún predicador por televisión o algún evangelista? ¿Oye alguna vez que alguien se levanta de entre la multitud y dice lo siguiente?: «Si quiere usted convertirse en creyente, !renuncie a la vida! Rehúse asociarse con usted mismo, rechace todas las cosas que su ego anhela, quiere y espera. Esté dispuesto a morir por amor a Cristo, si es necesario, y mientras vive como un esclavo, sométase en obediencia a Jesucristo» !Eso no vende! No es un brillante mercadeo, pero es la verdad que usted escuchara en este blog.

Nos quedamos aquí, vuelvalo a leer, detenidamente y sobre todo preguntándose, ¿en dónde estoy yo, y a qué estoy dispuesto por llegar al reino de Dios?

Bendiciones y seguimos.

Antes de irme por el momento les dejo una alabanza para que pueda adorar al creador, es de la congregación «Nueva Generación en Cristo» si desea ver más, busquenos en YouTube, con el nombre de nuestra iglesia, y disfrute alabando y adorando a Jehová, nos vemos.