Dios me lo pidio, y me lo a devuelto

Capuchino appleBueno mis queridos amigos como siempre nos volvemos a juntar, hoy corremos por nuestro Starbucks, defintivamente un pastelito, si fueran dos, mejor, estoy encargando un pionono y espero que llegue en las próximas horas, hoy será simplemente una conversación entre amigos, o conocidos, tengo unas dudas y deseo saber que piensa usted, quizás me pueda sacar de esta duda que me viene molestando sobre todo cuando agarro mi iPhone5. Pero empecemos y el titulo de nuestra conversación es: Me lo pidió Dios, yo se lo entrego y luego El me lo devuelve.

TENGO UNAS DUDAS Y POR ELLO OS PREGUNTO:

Hace unos días recibi una afirmación espiritual que me dejo pensando y que hoy parafraseando un poco quiero dejar en claro algunas cosas y deseo preguntar otras, pero a mi me gustan las historias y por ello les voy a contar una que me servira, para al final hacerles las preguntas.
Le cuento de que tenía y tengo un iPhone5, que lo he comprado el día que salio, hice mi línea o cola (en peruano) y pasado unos momentos estaba saliendo de la tienda con la sonrisa en los labios, con menos dinero en mi tarjeta, pero con mi nuevo telefono activado, lo compre con 2012-iphone5-gallery4-zoom64Gb negro, brillaba por lo nuevo y feliz como una perdiz, siendo uno de los primeros en conseguir el último juguetito que saco a la palestra Apple, que dicho sea de paso estoy a la espera del nuevo reloj que parece que lo van a sacar en estos meses, asi como el nuevo iPad y el Apple TV en su última generación, incluyendo el iRadio que ya fue anunciado y que solo estamos esperando a que entrege el nuevo sistema operativo y a darle duro, pero bueno me encanta mi iPhone5, veo películas, juegos, música, mp3, aplicaciones para fotografías, videos, pintura, la bolsa, veo los partidos y sobre todo estoy en Facebook, y saco fotografías por monton de lo que veo diariamente y de la vida diaria de mi familia y mi trabajo, asi como en la congregación en donde estoy ultimamente asistiendo, bueno, soy fanático del iPhone, pero un día, Dios me lo pide porque se venía convirtiendo en algo demasiado importante en mi vida, incluso más que El, con el dolor de mi corazón, luego de muchas semanas, me doy cuenta, porque hago la prueba de que no puedo estar un día sin mi iPhone, siento que me falta algo y que busco en mis bolsillos y al no estar, me siento desprotegido y me doy cuenta de que El Señor tiene razón y debo entregarselo y lo hago, con dolor, con lágrimas en los ojos, me desago de mi iPhone 5, (ya sé que varios estan pensando ¿porqué no me lo regalaste a mi?) no, no quiero ser causa de idolatrizar a alguien, yo sé que varios se estan riendo de mi en estos momentos, porque no se tragan lo que les cuento, pero sigan leyendo y verán toda la historia, bueno, pasa un tiempo largo y un día el Señor me dá una señal de que ya he sido preparado para que El me desventuradodevuelva nuevamente mi telefono y ya tengo mi nuevo iPhone 5, El Señor me ha devuelto aquello que me venía dañando en mi relación con El. Pero le cuento, luego de que ya no tenía iPhone 5, caminaba hasta llegar a una tienda de Apple y ver, probar, jugar, pedir precios, entrar a internet, preguntaba el precio de acuerdo al modelo y compañía que me daba el servicio, a pesar de que ya me lo sabía de memoria, y regresaba a casa, en donde en algún momento entraba por internet a la tienda de Apple a ver un iPhone 5, los modelos, los colores, el servicio, semana a semana siempre estaba interesado en nuevas aplicaciones, en algo que tubiera que ver con este aparatito que ya se lo havía entregado al Señor. He visto case nuevos, las baterias adicionales, un amplificador para que suene mejor, prácticaba en el garage band para hacer mezcla con la música que tengo, igualmente probaba los videos que se pueden editar en el iPhone5, con 6 o 7 aplicaciones que tenía compradas anteriormente, el estuche a prueba de balas, una consolita y parlantes externos para la mesa de noche, pero ojo yo ya se lo he entregado al Señor, porque El me lo pidio, aunque ya me lo ha devuelto.
Entonces mis amigos, deseo aquí hacerles algunas preguntas: ¿usted cree que El Señor me lo pidio? ¿cree usted que fui obediente y se lo he entregado? y por último ¿cree usted que El Señor me lo ha devuelto? justo ahora que aparecio un amigo que me puede conseguir más baratos los accesorios como los parlantes externos, un case que viene con una bateria extra, asi como un quemador de CDs para poder hacer mis videos musicales  y grabar la música que tanto me gusta directamente desde mi iPhone5, como que suena a Mandrake el mago ¿cierto?.
Yo creo que no y mil veces no, yo quiero creerme esta mentira, ahora le digo es una mentira, primero porque todo lo que aquí le cuento es una historia pura ciencia ficción, nunca me ha ocurrido, era solo para hacer un ejemplo, nadie me ha pedido nada, no he entregado nada, ni se me ha devuelto nada, pero quisiera parecer espiritual, aunque todos saben de que eso no es cierto, sentía sus risitas cuando les contaba la historia, es que quiero buscar una justificación a lo que desea mi corazón hacer, cuando conté esta historia a unos amigos, la mayoría se rieron y dijeron ¿quién tú lo entregaste?, ¿de qué sabor quieres tu helado?, muchas veces queremos hacer ver de que El Señor nos habla y es simplemente una indigestión pero nos volvemos espiritualoides, mis amigos, asi no es la cosa, sobre todo porque el único que se engaña sería yo, porque todos saben que me gusta mi iPhone5 y estoy en la línea biblia-20cuando salga el nuevo, no el iPhone 5S, sino el iPhone6, pero no puedo ir intentando hacer creer a la gente cosas que son evidentes y que todos saben, porque si siempre me ven y escuchan que estoy hablando del telefono de marras, nadie puede llegar a pensar que lo he tirado al olvido.
Amigos, hermanos, debemos ser hombres que se ponen a cuentas con Dios primeramente antes de hablar o mejor dicho pensar antes de hablar, porque luego ya nadie nos cree ni lo que ve con sus propios ojos en nosotros.
¿Usted qué piensa? Me he dado cuenta de que por querer parecernos más espirituales decimos muchas cosas, que estudiamos la Biblia de tarde y mañana, y hasta de memoria la sabemos, pero es simplemente eso, memorizamos, pero no la estudiamos ni escudriñamos a pesar de gritar que lo hacemos a los cuatro vientos, decimos que hemos dejado de ser orgullosos y que hemos ganado la batalla al diablo en esa mafalda-parenárea y nos vanagloriamos de eso, sin saber de que eso justamente se llama orgullo, y un sin número de cosas que como decían «no toquen al ungido» creen y quieren que nadie debe decir nada, pero eso no es correcto, si estamos equivocados es necesario y saludable decirlo, por el bien de los que vienen detrás, si no pregunta o expresa lo que usted piensa jamás podre darme cuenta de que hay otras personas que escuchan y tienen  también voz.
Bueno si desean dejarme un comentario, se los agradecere, pero sabe, es necesario como dice la misma Biblia examinarnos a nosotros mismos, sin temor, con la verdad, no con eso que me dijo alguien «yo soy pastor» bueno yo no tengo la culpa «yo soy del Barcelona» y estoy triste porque Tito Vilanova el entrenador tiene cancer y ha tenido que dejar el puesto, pero yo quisiera ser un siervo, y no puedo, soy solamente aprendiz de siervo, porque hasta el día de hoy hay ciertas cosas que no hago a pesar de que me las ordena mi Señor.
Cuidese mi hermano y como siempre digo, aquí esta abierta mi casa, para aprender de nuestra Biblia, no lo que dice fulanito de tal en su libro de como ser cristiano, no, de la Biblia, con la Biblia y pidiendo al Espíritu Santo revelación y sabiduría para entender el verdadero mensaje de Dios, cuidese, no va a ser de que un día el Señor le pida a usted, y usted tenga que entregarse verdaderamente al Señor y no seguir jugando a la iglesita. Todo lo escrito es ciencia ficción, cualquier parecido es pura coincidencia, pero sabe mi hermano, de que los hay los hay.

Tan solo palabras, palabras y más palabras

Capuchino 002Nuevamente nos volvemos a encontrar pero hoy vamos a hablar algo interesante, como pienso diariamente, dejaremos la charla sobre el diezmo para la próxima, pero saben mis amigos, hoy tenemos que conversar, porque sigo caminando, arrastrando los pies por estas calles que sobre ellas ha pasado tanta gente y me doy cuenta de que entre esta gente los cristianos seguimos caminando sin verdadramente darnos cuenta del paso que hemos dado, por ello pense que era lo mejor empezar a conversar al respecto, como siempre les digo, vamonos al Starbucks por un capuchino Venti, mucha azúcar, un poquitín de canela, buscamos un Tiramizu, o un Nan o aunque sea un pan con queso, pero al horno, regresamos a casa y con la Biblia en la mano, empecemos a escudriñar al respecto, pero como siempre me gusta contarles historias, hoy voy a decirles que, nos fuimos a la fiesta que por navidad dan a todos los hijos de los trabajadores en el hotel Hyatt en donde desde hace más de 12 años trabajo (bueno esto último es un decir) por lo que nos fuimos todos, a tomar chocolate, comer pizza, pollo, galletas, palomitas, pie de manzana, café, (yo solo comí, un pastelito de chocolate), y al final terminamos almorzando en iHop, porque teníamos hambre casi todos, por lo cual, no pude como comprenderan asistir al servicio del día de hoy domingo de mi congregación, ¿de qué hablaron? ni idea, pero probablemente siguieron hablando sobre el diezmo y del honor y la integridad u obediencia. Porque como dijo el pastor hace una semana, las finanzas estan mal, vamos para los números rojos, y bueno hay que jalarle las orejas a aquellos que no aportan su diezmo, (no lo dijo tan claro, pero a buen entendedor pocas palabras) en especial los servidores, hombres y mujeres a quienes se dice que se viene pastoreando, cuidando, corrigiendo y enseñando en amor, llevándolas a pastos verdes, preparándolos, para que puedan hacer la obra para la que Dios los llamó, bueno hay que hacer el intento, yo creo que si enseñamos la verdad, Dios velara por su iglesia. En fin luego volveremos a intentar empezar el tema sobre el diezmo.

Pero comencemos, mis amigos, durante años he venido viendo de que la manera de convertirse en cristiano es lo mas fácil del mundo, tan solo repite la oración, o pasa al frente y intercessao 01oraremos por ti, reconoce que el Señor es tu Señor, inclusive algunos se atreven un poco más y quieren que seamos llenos del Espíritu Santo y hablemos en otras lenguas (ya estaremos conversando al respecto más adelante) y casi a la fuerza, debemos, tenemos o inclusive hasta nos fuerzan a que tenemos que hablar en otras lenguas para que exista un sello de haber recibido a Cristo en nuestro corazón o sea como siempre digo vivimos de experiencias, debe existir cosas espectaculares, para que podamos creer, inclusive luego de hacerte hablar en lenguas, pasas directamente a la piscina para bautizarte y dejarte limpito como niño de pecho para que entres al cielo, solo falta el talco johnson para dejarte hasta purificadito y blanco como la nieve.

Te cuento mi hermano, pero por favor leelo lentamente y mastica cada una de las palabras aquí escritas, la salvación para los pecadores le costó a Dios su propio Hijo, le costó al Hijo de Dios su vida, y a usted le costará lo mismo. La salvación no es el resultado de un ejercicio intelectual, en donde por el hecho de pasar al frente o recitar a voz en cuello y con frases entrecortadas por la emoción de que usted se ha convertido en cristiano, de que por el simple hecho de que oraron por usted, ya se encamina a recibir todas bendiciones que dicen que Dios tiene para usted. La salvación mis queridos amigos viene de una vida (ojo por favor) que se vive en obedicencia y servicio a Cristo según esta en las Escrituras. Es el fruto de acciones, no de intenciones, mire mi amigo aqui debe usted entender que si su vida no cambia, y no hablo de portarse bien, ni de ya no tomar su cervecita diaria, ni de gastarse su dinero en mujeres y fiestas pasioneales los fines de semana y llegar arrepentido el domingo para volver a empezar dificuldade6el lunes con el día del zapatero y volver a las mismas andadas, no, es que su vida desde el momento en que asegura haber recibido a Cristo, una vida de obediencia a la Biblia y de una vida en la que Jesús es su Señor y de que usted simplemente es un esclavo sumiso, que solo hace lo que Su Señor le ordena. No hay lugar para pensamientos raros ni para objetar ni preguntar ¿y porqué?, no hay momento para ser simplemente asistentes y espectadores pasivos e inoperantes, porque todos tenemos buenas intenciones, pero muy pocos, poquísimos son aquellos que las palabras las transforman en acciones, y no como aquellos que el domingo gritan y danzan, se levantan diciendo soy hijo del Rey y terminando el servicio vuelven a sus casas con el corazón lleno de orgullo y vanidad, pero que el lunes vuelven a la monotonía degradante de volver a no hacer nada de lo que se comprometieron a hacer para conocer a Cristo y expandir el evangelio. Recordará mi querido amigo si le ha dado una leída al libro de Apocalipsis (de lo contrario dese una vueltita por allí, no muerde), Juan vio en su visión del juicio un Libro de la Vida, no es un libro de palabras, ni de buenas intenciones, ni de promesas no cumplidas, ni siquiera de buenas ideas, ni mucho menos de promesas que hacemos los domingos, no es un libro de reflexiones cuando nos sentamos en nuestro lugar secreto y a solas decimos que vamos a cambiar. La vida que vivimos, si mi amigo, lo que es usted día a día y noche a noche, no las palabras que decimos por muy agradables que estas sean, es lo que determina nuestro destino eterno, como siempre digo, «de buenas intenciones esta poblado el infierno, pero de lo que eres todos los días de tu vida, es lo que te puede llevar a la vida eterna», ¿lo cree? si usted cree que porque asiste a la iglesia y da su diezmo, asi como pertenecer a algún ministerio o inclusive es pastor o profeta o es esposa del pastor, ya se gano el cielo, pues mi amigo se equivoca, lo que es usted delante de Dios y comparado con lo que dice la Biblia, es lo que a usted le dará la corona de poder llegar al cielo, de lo contrario, estamos vendiendo unos bronceadores que son una maravilla, lo dejan oscuritos, oscuritos de la noche a la mañana y si compra en envase familiar, le regalamos otro para sus más allegados.

Usted y yo debemos acudir a Dios, reconociendo nuestra total indignidad e incapacidad, y escuchelo bien, debemos morir al orgullo y abandonar el yo, muchos dicen !pero si yo ya lo woman_9he hecho! eso se llama orgullo, te crees humilde, pero aún tu corazón esta orgulloso, por eso se llena de vanidad cuando se autonombra !humilde!, por eso le voy a hacer una preguntita ¿usted ama a Dios, más que a usted mismo? yo creo que la respuesta de la gran mayoría es un rotundo !SI!, entonces, ¿porqué en su corazón hay envidia? ¿ira, contienda?, ¿orgullo, vanidad?, porque nos creemos mejores, que el resto de personas, porqué no podemos ser como el buen Samaritano y siempre seguimos de largo y solo ayudamos a aquellos que conocemos y que nos agradan, pero a los demás, seguimos de frente, y es que nuestras acciones demuestran lo contrario a lo que decimos con palabras, ¿buscas de Dios?, ¿expandes la Palabra a toda criatura?, ¿verdaderamente si Jesús te llama, lo seguirías, sin preguntar a donde?, interesante ¿verdad?, ¿estas dispuesto o dispuesta a a dar tu vida por Cristo?, entonces porque no eres capas de juntarte con El todos los días, ya sé, estás cansado de un día de trabajo, pero en el momento de necesidad, corres a buscarlo, ¿cierto? entonces eres cristiano buscador de milagros, no de Dios. Pero no te preocupes, habemos muchos como tu, pero estamos a tiempo de arrepentirnos y buscarlo en tiempos de necesidad, de abundancia, de penas y alegrías, y El estará allí, para recibirte en sus brazos llenos de amor.

Deseo en este momento que vaya conmigo a Mateo 7:21-23 y le dé una mirada con comparación con su propia vida, esto se encuentra luego del Sermón del Monte, «ahora permíteme advertirte otra cosa: cerciórate de no engañarte a tí mismo. ¿Eres en realidad miembro del reino de los cielos?» «No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, mentirassino el que hace la VOLUNDAD de mi Padre que está en los cielos. Muchos me dirán en ese día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad». Por eso mis amigos a esos que les encanta hechar fuera demonios, eso no garantiza que eres cristiano, no es por el espectáculo, ni por las emociones o por las experiencias, esto se llama orgullo, yo hice esto, yo hice lo otro, mis hermanitos, si usted escucha mucho eso de que «yo hice, yo heche, yo libere», yo aquí, yo allá», desconfie, lo más probable es que usted este delante de una persona que en el mejor de los casos se engaña a sí mismo del poder que tiene o dice tener viene de Dios, pero sabe es orgullo y vanidad que delante de Dios son pecado, por lo tanto no les crea, compare su vida, ojo su vida, no lo que dice, sino como vive con la Palabra de Dios y luego pueda usted decidir si es o no un hombre o mujer de Dios.

Mis hermanitos amados, Jesús nos enseñó un evangelio de fuertes principios y compromiso a todos aquellos que deseen llegar al cielo, pero sabe todo se puede resumir en una palabra, si mi amigo si usted entiende su significado y lo que significa para Dios, le asegurio que no solo su vida va a cambiar, sino podrá darse cuenta de que Dios lo empieza a bendecir porque es ya un Hijo del Altísimo, la palabra es «justicia», ¿no me cree?, bueno volvamos a nuestra Biblia, «Os digo que si vuestra justicia no fuere mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el reino de los cielos» (Mateo 5:20). Para ahondar un poquito más,»el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos» entrará en el Reino, y ya para acabar, mi amigo, si usted y yo no vivimos una vida genuinamente recta, no importa lo que haga, ni lo que diga, mucho menos importa que usted de su diezmo o pague todas las deudas de su congregación, usted no llegará al cielo ni de panzaso, no se engañe, ni porque pone cara de angelito, lo van a dejar entrar, para mayor seguridad siga leyendo su Biblia en los versículos 21-26 y podrás praydarte cuenta de cuál es el camino por donde cada día transitas, como empece este post, caminando por esas calles en donde los cristianos creemos que nos llevan al cielo y son caminos de perdición porque nuestro estilo de vida es lo que afianza nuestro camino, ¿a dónde vas? mira por donde caminas.

Bueno los dejo, nos vemos pronto, seguimos estudiando, pero sabe luchando por cambiar, por escudriñar la Palabra y versículo a versículo, frente al espejo, mirar los resultados, no le cuento cuales son, solamente que el espejo como en el retrato de Dorian Grey no nos muestra toda nuestra realidad, tan solo el Espíritu Santo nos muestra nuestro pecado, pero seguimos, perseverando por ser algo, esperamos lograrlo, tan solo Dios juzgara, bendiciones y nos vemos pronto.

¿Orando en forma persistente y efectiva?

Nos volvemos a encontrar pero ahora con un frio que pela los huesos, desde hace un par de días, que bajo la temperatura, estamos a punta de chocolate caliente, con leche de vaca de lata, pero con su pancito y es que viene haciendo mucho frío, sobre todo para mi que soy friolento, y encima toda la semana he trabajado muy temprano por lo que tengo frío aún, pero bueno hay que seguir, y eso que en otros estados, el frío es mas intenso y hasta nieve cae, oramos por todos aquellos que están pasando necesidad en el otro lado del USA, Nueva York, entre otros estados que fueron azotados y siguen por las tormentas, pero hoy vamos a leer un poco y es que sabe mi amigo, he venido escuchando y poniendo mucha atención a diferentes oraciones, (incluyendo la mía) por alguna necesidad, por sanidad, por algún milagro, por las comidas, etc, y me puse a estudiar un poco y encontré a un pastor que en el siglo XVII, o sea que han pasado muchos lustros, llamado John Preston que nos dice a la letra sobre la oración:

Si se lleva a cabo de una manera demasiado formal o habitual, sería mejor que la omitiera completamente; porque el Señor considera sus oraciones cualitativamente no cuantitativamente. Cuando es una imagen externa, un cadáver de oración, donde no hay vida, no hay fervor, Dios no le da importancia. No se engañe, es una mentira muy común. Pueda que la conciencia de un hombre estuviera sobre él, si la omitiese por completo. Por lo tanto, cuando hace algo, su corazón se satisface, y así empeora cada vez más. Por consiguiente, considere que el cumplir con el deber no es lo que el Señor hace caso, sino que él pide que se haga de tal amnera que se pueda lograr el fin y se efectúe aquello por lo cual usted ora.

Si un hombre ordena a su sirviente a ir a un sitio, no es el hecho de que vaya de aquí a allá lo que a él le importa, sino que lleve a cabo su tarea. Así es con todas las demás obras. A él no le interesa la formalidad del rendimiento, sino que se haga lo requerido de tal manera que pueda serle útil. Si usted envía a un sirviente a que haga una fogata, y él va y reúne madera verde y pone carbón por ababjo, esto no es hacer una fogata. El debe conseguir madera seca, o soplarla hasta que arda y sea adecuada para su uso.

De modo que cuando su corazón no es adecuado, cuando parece madera verde, y usted llega para calentarlo y encenderlo por medio de la oración a Dios, puede ser que cunmpla con este deber, y salga con el corazón frío y destemplado como estaba antes. Amado mío, esto no es cumplir con este deber. El deber se lleva a cabo con eficacia cuando su corazón es estimulado por él, y se adapta a un mejor ritmo y temperamento que el que tenía antes.

Si usted halla lujuría, su tarea allí es resolverlo por medio de la oración, para razonar sobre el asunto, para objetar delante del Señor, y no ceder hasta poner todo en orden en su alma, hasta perfeccionar su corazón a través de Dios. Y si usted encuentra que su corazón se aferra demasiado al mundo, debe dejarlo y apartarse de eso. Si nota que está sin vida, sin ganas e indispuesto, debe elevar su alma al Señor y no ceder hasta que se avivve. Esto es llevar a cabo el deber de una manera aceptable al Señor, de otro modo, es un rendimiento hipócrita puesto que el hombre no está dispuesto a dejar el deber ni a efectuarlo fervorosamente y de manera viva y celosa.

Aquel que lo omite es una persona profana, y el que lo hace celosamente y a propósito es un hombre santo; pero el hipócrita se halla en medio de ambos. Hace algo pero no a conciencia. Y, por lo tanto, si se da cuenta de que ha hecho este deber descuidadamente de un día al otro, negligente y superficialmente, sepa que eso es un rendimiento hipócrita. Por consiguiente, cuando pasamos mucho tiempo exhortándolo a que constantemente haga este deber, recuerde que aun lo tiene que hacer de una manera tal que tenga valor y vida, para que pueda ser aceptable a Dios.

Desgraciadamente, todos los creyentes nos podemos relacionar hasta cierto punto con las  palabras acusadoras de Preston. No hay nada tan sagrado que Satanás no invada. De hecho, cuanto más sagrado sea algo, más deseo tiene de profanarlo. Sin duda hay pocas pocas cosas que le agraden más que ponerse entre los creyentes y su Señor durante la intimidad sagrada de la oración. El pecado nos seguirá hasta la misma presencia de Dios; y no hay pecado más poderoso o destructivo que el orgullo.

(De aquí en adelante escribo yo) El llegar a creer que porque oramos y levantamos las manos estamos haciendo la voluntad de Dios, y le voy a poner un pequeño ejemplo de cómo poco a poco nos vamos acomodando o haciendonos creer a nosotros mismos que nuestras oraciones son dignas de ejemplo o sea nos convertimos en orgullosos, y debe o tiene la obligación Dios de escucharnos, durante un tiempo, me puse a escuchar mis propias oraciones y las oraciones de amigos, pastores y maestros por las comidas, un tiempo de acción de gracias y oración, y note que todas tienen un común denominador y parece (ojo quizás haya excepciones) de que se convierten con el paso del tiempo en meras repeticiones de textos identicos y hasta utilizamos las mismas palabras, los mismos ademanes y hasta la misma expresión en el rostro, para luego convertirse en un cumplir y en un terminar rápido porque todos tenemos hambre y Dios conoce nuestro corazón y Amén, todos felices y contentos, pero como decía nuestro amigo Preston, cumplimos con la oración, la hacemos y hasta quizás hasta las lágrimas de cocodrilo derramemos, pero no hay el fuego del alma que nos acerca al trono de Dios, sino el cumplir que nos acerca al plato de comida, por ello, mi amigo algo debe de cambiar en nuestro interior, debemos de llegar a entender que verdaderamnte significa orar al Señor, hacer nuestro trabajo, pero poner en ello la vida, arreglando nuestra falta de acercamiento al creador por culpa de nuestros pecados, ponernos a cuentas con Dios y acercarnos en sumisa oración, para levantarnos a hacer su santa voluntad. Por ello también muchas oraciones no son contestadas, porque se hacen como mera rutina, como algo repetitivo, simplemente como nos sabemos hijos del Rey, Dios tiene la obligación de contestarnos, tenemos ese orgullo malsano que impide que verdaderamente nos acerquemos a Dios con un reconocimiento de que somos pecadores y que solicitamos su perdón, pero muchas veces nos acercamos a exigir nuestro milagro y esto debe de cambiar, un día, por amor a Dios, escuche su propia oración y quizás pueda escuchar lo orgulloso que se siente al hacerla, nos vemos pronto, bendiciones y comprese una grabadora, le aseguro que le ayudara para saber que es lo que ora. Yo tengo una si quiere se la presto.

Ni una sola letra, mucho menos una palabra

Queridos amigos, hermanos, conocidos, visitantes y cuanto transeunte entre por este blog, sabe mi amigo, como en el título, no cambio ni una sola letra, mucho menos una palabra de todo lo que en este blog se ha escrito y se seguirá escribiendo con la ayuda del Espíritu Santo y Dios como Señor nuestro. Y es que me doy cuenta de cómo caminan las congregaciones de hoy en día, pastores que no se preparan para llevar el mensaje de la Palabra de Dios a sus ovejas, (quiero creer eso, porque si siempre son asi, Dios mio, agarranos confesados) que tratan de entretenerlas y darles palabras dulces, halagadoras, promesas de tiempos mejores, de bendiciones, de milagros, de historias que ni empiezan ni acaban, de sermones que no tienen ni pies ni cabeza, parece esos restaurants en donde coma lo que usted quiera y en un solo plato mezclan ensalada, carne, pollo, jamón, pan, fideos, pastel, capirotada, y al final usted sabe que comió, pero no sabe exactamente, ¿qué?, pero donde me pongo triste, dolido y hasta avergonzado, es que nos comemos todo, con una botellita de agua para que resbale, Dios mio, ¿qué hacemos con tu pueblo?, si usted ha leído los post anteriores, en donde hablamos del arrepentimiento, de la confesión de pecados, de todo aquello que debe hacer un pastor para poder llevar al buen camino al pueblo, bueno debemos de orar para hacer que el Espíritu Santo traiga convicción de pecado a aquellos neofítos que suben a un pulpito a hablar de cualquier cosa, y como le comentaba a mi esposa, «Yo creía que Cantinflas se había muerto» porque de la ensalada de cosas que se dijo desde el altar, nada pude concluir, pero como les decía, lo que más tristeza me causo, es que todos gritaban «Amén, aleluya, gloria a Dios» y eso hace que a ustedes mis queridos amigos que buscan de Dios de verdad, les pido, oren, porque el poder del Espíritu Santo, nos ayude a empezar a predicar y enseñar la verdad y podamos sacar a nuestro pueblo de la ignorancia del conocimiento de la Biblia, porque de lo contrario les seguiremos engañando de que se van al cielo con cantinflas y todo, y que la van a pasar divirtiéndose con el barredero y con Ahí está el detalle. Hoy se hace más patente eso que alguien dijo «la Biblia es un gran libro de historia, pero si el Espíritu Santo no llega a tu vida, nunca se convertirá en la Palabra de Dios, siguiendo en la ignorancia, aunque la sepas de memoria, solo es letra, jamás es vida». Muchos ya llevan tiempo de asisitir a la iglesia por lo que he podido ver, pero no han crecido en el conocimiento de la Palabra de Dios, son caminantes de Biblia bajo el brazo, algunos asiduos asistentes, la mayoría, domingueros hermanos, que aún caminan entre gallos y media noche entre pasos noctambulos de la mundanalidad. Los pocos, con una sonrisa doliente, como yo, sufren al ver a nuestro pueblo que sigue un caminar, pero como dice la canción, «caminante no hay camino, se hace camino al andar», pero sabe mi amigo es un error, porque Jesús es el camino, «tan solo debemos seguirlo a El».

Por ello vengo asi como apachurrado por el camión de la ignorancia y hecho papilla el cerebro como si me hubiera pasado una estampida de elefantes por el cerebro hasta dejarlo hecho puré, pero debemos seguir, levantarnos y agarrar la Palabra de Dios y enseñar la verdad aunque se enoje la gente, en especial esos pastores, maestros, profetas que preparan sermones en 10 minutos y que terminan haciendo creer que para ir al cielo solo debes declararlo. Alguien me dijo hace un tiempo «Hermano, usted es muy exagerado», bueno si quieres dejar la cruz y solo llevarte los milagros, entonces sigue, yo prefiero tomar mi cruz, arrepentirme cada día de mis pecados y luchar para no volverlos a cometer, aclarando que muchas veces tengo que volver a arrepentirme, y pedir nuevamente perdón al altísimo, pero creó que es mejor volver a hacerlo, que simplemente creerme bueno y seguir caminando y como se dice vulgarmente «tirarme el cristo a la espalda» osea «no me importa nada y yo vivo como creo» no, no es así, por ello nos sentaremos a meditar, y seguiremos aún con más fuerza, con más ganas, con más profundidad, escudriñando la Palabra de Dios, orando y rogando de que podamos recibir mayor revelación y ayuda del Espíritu Santo para poder enseñar desde aquí, las verdades que Dios nos ha dejado en Su Palabra.

Hace unos post deje la puerta abierta para ver cuántos de los de mi congregación en especial (nadie me ha hecho comentarios, por lo cuál no sé si me visitan, aclarando que muy pocos son los que saben de este blog, aunque vamos a hacerle un poco más de propaganda en estos días) y de otras congregaciones de San José, California querían reunirse a estudiar la Biblia una vez por semana, bueno avisen, porque seguimos, es de urgente necesidad, para hacer la obra que nos fue encomendada y para convertirnos en cristianos de verdad. Espero respuestas, gracias.

Los espero nuevamente, pero sabe mi amigo, oremos al Dios de los cielos, usted sabe que el Dios de Abraham y de Jacob, así como el suyo y mio, bajo el poder del Espíritu Santo cambie vidas, redarguya corazones, y nos ayude a seguir en el crecimiento del conocimiento de su voluntad, y que está se haga realidad en nuestras vidas.