Queridos amigos, hermanos, visitantes y algún que otro extraviado que llego por aquí, bienvenidos todos, luego de una mañana de estudios y ver que seguimos por los mismos caminos de siempre, paso a escribirles una reflección, me imágino que usted y como yo queremos llegar a la estatura del varón perfecto, me imágino que lucha por cada día parecerse más a Dios y no al Chavo del 8 que allí si, tendríamos problemas y que muchas veces creemos que nos vamos a la farmacia y pedimos una cajita de 28 pastillas para convertirnos en tremendos hombres o mujeres de primer orden, aunque lo único que recibimos por respuesta es: «y de ¿qué sabor quiere su ice cream?», no, no hay pastillita milagrosa como las de las dietas de tres días y baja 50 libras, eso no existe, es un engaña muchachas solamente con el fin de sacarles dinero, pero si tomamos nuestra Biblia, encontraremos versículos que nos permitirán marcar la diferencia con los demás.
«Crezcamos en todo en aquel que es la cabeza, esto es Cristo» (Efesios 4:15)
El crecimiento espiritual es sencillamente cuestión de aplicar principios bíblicos, pero hay muchos que creen que solamente los gigantes espirituales experimentan un gran aumento de fe.
He leído acerca de místicos que se arrodillaban y oraban de ocho a diez horas, haciendo huecos en los pisos de madera. He leído acerca de Robert Murray McCheyne, que empapaba las páginas de su Biblia y la madera de su púlpito con sus lágrimas. Y he leído el libro Poder mediante la oración de E.M. Bounds, quien dedicaba muchas horas a la oración. Cuando supe de esas personas, lo único que pude pensar fue que nunca alcanzaría ese nivel. Y por más que luchaba primero por levantarme temprano a eso de las 6:00 am (y eso que me venían a levantar) no podía orar más de 20 minutos, luego de lo cual empezaba a repetir la misma oración, por meses trate, pero no era lo mio, entonces me dí cuenta de que no es el tiempo, es la disposición del corazón y algo más. Para llegar a caminar en oración. Dios nos usa a cada uno de nosotros de maneras distintas.
El crecimiento espiritual no es una proeza mística por un grupo selecto que está en un plano espiritual superior. Más bien, es sencillamente cuestión de glorificar a Dios confesando el pecado, confiando en El, llevando fruto, alabándolo, obedeciendo y proclamando su Palabra, orando y guiando a otros a Cristo. Esas son las características que todo cristiano necesita a fin de crecer en la fe. Cuando se concentre en ellas, el Espíritu de Dios lo trasnformará a usted a la imagen de Cristo, de un nivel de gloria al siguiente.
Para terminar, aqui tenemos la receta para ser hombres y mujeres de excelencia, otra forma, no hay, si quieres probarlo, hagamos la lucha, poquito a poco, algunos estamos luchando por hacerla, ¿te nos unes? hoy es un buen día para empezar, si no se glorifica a Dios, si no se hace la obra, si no proclamas su Palabra simplemente estas dando un paseo entre la multitud que te puede aclamar, convirtiéndose en ojarasca, solo ruido, pero si perseveras hasta el final, ya está escrito el nivel de excelencia que puedes obtener, llegar a tener la imagen de Cristo, ¿algo mejor?, bendiciones y nos vamos, pero quedamos formalmente en vernos en un rato. Y si deseas unirte al grupo, pues empieza reconociendo que eres pecador, arrepientete y empecemos a orar y expandir su Palabra entre aquellos que no lo conocen aún (entre cristianos es demasiado fácil).
Por último un pensamiento más, te dejo una alabanza, no recuerdo haberla subido, (perdónenme si es repetición) pero nunca la repetición para alabar a Dios es una ofensa, levante sus manos, alabe, adore en espíritu y verdad, que es lo que nuestro Dios viene buscando aquí en la tierra.
Bueno ahora si los dejo por unas horas, cuidense y recuerde es tiempo de empezar a hacer la obra para la cual fuímos llamados.
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